Cobriza talla de mi piel de cedro,
te eriges como la rama nueva
y el brote primaveral de este roble seco,
encendida en el cincel de un artista muerto.
Regalándole a mi raíz tu cosecha de tempestades,
sembrarás vientos.
Blanco e inédito, este ébano
decorándote el pelo fresco,
dice firme y convencido, haberse tragado al tiempo,
trocando color por sabor y dolor por miedo.
Haya en tus pensamientos y hemlock en tus palabras,
paraísos en tu veneno y pinos en el alma.
Es el aserrín tu amor y la viruta un juego.
Cerezos color miel en la mirada,
de algarrobo llevas las pisadas.
Sensación unívoca, en vos no caben piedras,
solo puedes portar con orgullo un corazón clavado y de madera
domingo, 18 de mayo de 2008
Carpintería
Amor Matemático
Desafiaremos cada postulado matemático,
cubicando el suelo, con potencias de dos en dos
multiplicando la posibilidades de sobrevivir a embates,
dividiendo malos ratos, sin restos ni porción.
Cociente exacto tu cuerpo sobre el mío
restando dolor sumamos años,
simplificando problemas, con reglas simples
elevando los espíritus a la enésima potencia.
Para así resolver inecuaciones del pasado,
vos sos todo en primer grado, vos mi gradación,
nosotros binomio perfecto.
Empecemos la hipérbola infinita
sujetados a los ejes que nos cruzan,
positivos al amar, negativos jamás.
Nuevas coordenadas nos traerán
trinomios, cuatrinomios y todo lo demás,
desajustando cada teoría haremos caminos nuevos.
Demostrando simplemente sin comas, puntos ni signos que:
Uno más uno, es la suma infinita de cada segundo donde nuestro amor es la única ley sin razón.