Porque creo en la piel cambié tantas veces de forma, primero fui largo y otras redondo fui hasta Marte y volví en tus respiros, se evaporaron los apagones y se excomulgaron mis pecados cuando tu boca sentía y la mía cerrada, se tragó estos años. Porque creo en vos, en cada gesto, en las vueltas en tus placentas nutritivas y la sangre obsoleta, retorno a la inocencia de tus palabras y tus pantanos, el barro se esconde en las raíces de las flores mas bellas, sé, de esa harina no he de beber el agua suena en otro costal, y el halo de soledad es mi paz mi castigo y mi voz, porque creo en tus manos de greda traigo mi nudo en los bolsillos y la cuerda al cuello, esperando ver tus tentadoras ramas ajenas.
domingo, 12 de abril de 2009
Heme aquí
Publicado por
Brujo
en
20:04
viernes, 10 de abril de 2009
Yeame
Publicado por
Brujo
en
20:29
Épicos y puntiagudos
se insertan en mi piel,
uno a uno,
los segundos del vacío.
Multiplicando la esencia
del intiempo
se me arrugan las manos,
se conjugan los inciensos
que dan por resultado
acordes vanos de piano
llevándose entre el ceño
la tristeza de mil años.
ahí me quedé
solo
como si no hubiese pasado
como si no te hubiese encontrado
desmenuzando pétalos de mar
y el dolor me gana
y a veces me deja,
pero permanece intacto el recuerdo
de los caminos errados,
de la luz de aquellos días
donde todo era blanco
y la risa del despertar era nuestro canto
y las noches, eran....n u e s t r a s....n o c h e s.
y se me clavan hondo,
me brota sin pausa este adormecido respiro,
desde el pecho hasta la boca,
en sensoriales latitudes
extremándome el quejido
¿adónde te quedaste?
¿por qué me dejaste dormido?
y la paz en mis ojos
se te pegó al ombligo
cuando la sembré esa tarde,
para que otro recoja el cultivo
y de tus arados mi ciencia,
y de tus alas mi camino.
se insertan en mi piel,
uno a uno,
los segundos del vacío.
Multiplicando la esencia
del intiempo
se me arrugan las manos,
se conjugan los inciensos
que dan por resultado
acordes vanos de piano
llevándose entre el ceño
la tristeza de mil años.
ahí me quedé
solo
como si no hubiese pasado
como si no te hubiese encontrado
desmenuzando pétalos de mar
y el dolor me gana
y a veces me deja,
pero permanece intacto el recuerdo
de los caminos errados,
de la luz de aquellos días
donde todo era blanco
y la risa del despertar era nuestro canto
y las noches, eran....n u e s t r a s....n o c h e s.
y se me clavan hondo,
me brota sin pausa este adormecido respiro,
desde el pecho hasta la boca,
en sensoriales latitudes
extremándome el quejido
¿adónde te quedaste?
¿por qué me dejaste dormido?
y la paz en mis ojos
se te pegó al ombligo
cuando la sembré esa tarde,
para que otro recoja el cultivo
y de tus arados mi ciencia,
y de tus alas mi camino.
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