domingo, 30 de marzo de 2008

Nubia y Luca (El sueño muere)

Nubia despertó a la mañana en los brazos de siempre,
lloraba desconsolada en sus sueños,
las manos de Luca secaban el azúcar,
húmedas las manos de la sal de sus dueños, llevaba Nubia.

La vida parecía hueca sin suelo y de hielo,
el amor del cielo y del viento barrió su alma en celo,
nunca nada sería igual desde aquellos besos
Nubia vivía el destino tatuado en ecos.

Luca esa mañana eligió ya no despertar,
e irse a volar,
su cerebrozón parecía satisfecho,
fue el padre de la luz, el agua y el fuego,
con el alma de destino cierto
por las manos borradas, de su amada.

Llegó hasta Nubia su aliento
y en un soplo se fundieron.
Abordaron desde la orilla los veleros
el se fue desnudo de cuerpo, ella con piel y velo.

Naufragaron en el mar hasta un mundo nuevo.

Nos dejaron el amor y la magia de ese encuentro, con destino ciego.

Para que de esta forma yo, mi amor pueda contarle al mundo entero,
que lo nuestro es verdadero,
aunque no esté para decírtelo y mi cuerpo sea del viento,
aunque en su pecho recostada lo leas,
y tu corazón sienta que hoy, ha nacido de nuevo.

Nubia y Luca (El nacimiento)

El descenso de Luca fue el fulgor,
de los ojos de Nubia nació el esplendor
la luz conocía su destino cierto
el espacio infinito y un viaje de ida, eterno.
Luca juraba amor eterno por un día,
Nubia reía,
fundieron sus pieles para que nazca el fuego,
la oscuridad conocía su destino cierto,
los abismos prohibidos, lejos del cielo.
Besos montados, únicos y perpetuos,
de ese amor, la luz y el fuego, nació la arena mojada,
el agua conocía su destino cierto
ocupando los cráteres ocultos del desierto.
Las agujas giraron y se extinguieron,
Luca tuvo que volver en sus veleros,
Nubia partió en dos, su alma y su corazón,
así nació el dolor de destino certero.

Nubia y Luca (El Interludio)

Nubia nunca lo necesitó, no lo quería
nunca hizo caso al destino, Luca lo escribiría,
él en cambio la buscó toda la vida
el mundo se derrumbaba y él se enamoraba.
Cuando llueve, los charcos se llenan de gente,
es inevitable, lo que debe, va a suceder.
Él nada podía darle, solo una brasa encendida.
Ella se iba a quemar, con la luz derretida.
Luca remontó entonces, vuelo en el abismo
a ella habría de buscar, sin pensar en consecuencias.
Por aquellos días se reinventaba,
el viento para Nubia,
para Luca, la lluvia y una herida.

Nubia y Luca (La Promesa)

Así Luca decidió robarse a Nubia por pedazos
citando entre sus letras, cada luna y un espacio
dirían sus rimas de la boca y de los besos
sin igual ni comparación, prohibidos y reos.
Escribiría con sus manos de las manos del secreto,
para Nubia descifrar con el alma sus desvelos.
Resignado Luca muere y nace en cada tempestad
el mar separa sus cuerpos, por la suerte sin suerte, ni piedad.
Por ello trazará nueve rutas nuevas
inventando un alfabeto, el océano cruzará en el intento.
Construirá puentes de amores viejos
terraplenes de cicatrices
y con suspiros los veleros.
Perpetuará este amor prohibido
en la marcha de estos versos
Nubia y Luca concebirán en la piel, el mismo infierno.

Nubia y Luca (El sueño)

Hoy Luca despertó llorando,
húmedas también las manos,
en sus sueños,
Nubia vivía penando
y secaba sus lágrimas dulces, en vano.
De día Luca pisaba otras tierras,
de azares y luchas, de nuevas guerras,
nunca pensó en conocerla, solo la había imaginado,
una bendición rayando maldiciones con candados.
Nubia solía vivir de amores devorados
como la luz al precipio, intentando.
No lo pensaba, ni lo imaginaba,
los vuelos subterráneos no nacen aún en el viento,
la rutina del amor dibuja acantilados.
Así entre soledades, letras y comodidades
Nubia Y Luca se encontraron
uno vacío y restregado de cariños quemados,
ella completamente revestida de besos y halagos.
Luca seguía soñando y allí la encontraba.
Nubia vivía despierta y lo aguardaba.
Realidades convertidas al castigo,
del secreto claro inventado,
ella nunca lo quiso el ya la había soñado.

Atreverse

A este poema me lo regalaron, la autora no quiso que publique su nombre pero bueno acá lo dejo.

Atreverse,
desgarrar el tiempo
agotar la llama
terminar el circulo
y volver al cielo
respirarte
entre cada vínculo
en cualquier poema
entre viejas notas
de empolvados sueños,
y perecer
con la bala al pecho
que tu nombre lleva
con líquida mezcla
de amor y suicidio
como cuando el templo
de mi cuerpo
absorbió la forma
de tus inquietudes
y formó con todo
lo que me dejaste
un universo propio
un jadeluz ambiguo
que en tus venas empieza
y mi ser corroe

lunes, 10 de marzo de 2008

Hoy Empiezo

























Este Blog comienza hoy, sin ninguna finalidad en especial, mas que solo la de compartir mis ideas, mis poemas, y algunas imágenes, con todos ustedes.


Mi primer imágen es esta, la de mi ciudad Rosario, de la cual estoy enamorado con Locura, y ella no hace mas que acompañarme con más fuego.
La esquina de Laprida y Córdoba, el edificio Bola de nieve, y mil historias en esa esquina, que forman parte de mi vida.

Hoy Rosario está nublado y triste, el gris todo lo abraza, hasta mi alma, que llora en el asfalto, donde solía caminar quemándome los pies de tu mano.